Durante siglos, el español ha evolucionado de variadas maneras.
Un ejemplo es el voseo, resultado de la evolución manifestada por los pronombres personales.
En España y gran parte de América representa el trato de confianza hacia el interlocutor. Sin embargo, algunos países conservaron el pronombre vos, proveniente del trato respetuoso según la norma peninsular. Es el caso de Argentina, entre otros.
Hoy en día, vosear es característico en esta región, y forma parte de una cultura que se abrió camino, mostrando la riqueza de un lenguaje sin límites.
Es así que la expresividad de este idioma se multiplica con los aportes de cada comunidad del mundo hispanoamericano.
Por lo tanto, nuestra propuesta es participar de esta globalidad.

jueves, 17 de marzo de 2011

El loco amor del voseo

Como una pequeña muestra de voseo, aquí va este fragmento de "Balada para un loco", un tango que despierta pasiones.

En cuanto al voseo, a diferencia del paradigma de "tú", "vos" es regular en sus formas. Así, en los tiempos en los que presenta una forma propia, como en el Modo Imperativo, no tendremos "quiere" o "ven", sino "queré" y "vení". 
Obsérvese también que se conserva la vocal de la terminación de infinitivo, por ejemplo, en el verbo venir (ven-ir). En consecuencia, si comparamos otros verbos con esta misma terminación, tenemos:
Ejemplo: VIVIR
Tú: Presente, vives; Imperativo, vive.
Vos: Presente, vivís; Imperativo, viví.


¡Que lo disfruten!  

Fragmento:
Quereme así, piantao, piantao, piantao... 
Trepate a esta ternura de locos que hay en mí, 
ponete esta peluca de alondras, ¡y volá! 
¡Volá conmigo ya! ¡Vení, volá, vení!   
Quereme así, piantao, piantao, piantao... 
Abrite los amores que vamos a intentar 
la mágica locura total de revivir... 
¡Vení, volá, vení! ¡Trai-lai-la-larará!